Parece que ya sale el sol por nuestras tierras. Y con él, parecen llegar signos de esperanza. Los datos de los contagios de la pandemia, bajan, las vacunas parece que funcionan, los hospitales y nuestros sanitarios se ven, un poco, aliviados. Aunque siguen yéndose muchos de los nuestros, por ese bichito que nos ha trastocado la vida. Rezo por ellos, que vayan a la luz, esa que ya nos comienza a iluminar por estos lares.

En otro orden de cosas, hemos llegado a Marte, un planeta que promete darnos muchas sorpresas sobre la vida.

Y, un científico, Avi Loeb, catedrático de astronomía de Harvard, anuncia el primer signo de vida inteligente más allá de la tierra. Todo un cóctel de lo que nos espera en un próximo futuro. ¿Nos están preparando? Intuyo que sí. Hay un plan detrás de todo lo que nos acontece y, hay que saber ver, leer, escuchar y comprender entre líneas.

Nuestros políticos. Siguen enzarzados entre sus…. (No digo nada, poner lo que queráis). Pero hay signos para la esperanza. Para poder volver a vivir “normalmente”. Ojala se materialicen esos signos y pronto podamos respirar sin miedos. Necesitamos un respiro y buenas noticias y, parecen que nos lo han concedido. A aprovecharlo.

Por otro lado, ya se sienten los primeros síntomas de la primavera, de la renovación de la vida. Que nos cubra a todos y nos renueve, y nos llene de luz, de salud, de ilusión. Hay signos de esperanza y lo celebro junto a todos vosotros.